Galletas para la mejor profe del mundo

Otro año más y ya se acabó el curso, se me ha pasado visto y no visto y mi niña ya pasa al cole de mayores. Pero lo mejor de todo es que  gracias a Isabel, su profe, mi niña se esta haciendo una personita estupenda, no solo que sabe practicamente leer y escribir sino que ha adquirido una serie de herramientas de tipo emocional, que le están sirviendo para resolver sus propios conflictos. No puedo estar más contenta. Desde aquí deseo gritar a los cuatro vientos la maravillosa educación pública que tenemos y la calidad de la gran mayoría de los profesores, que poseen una gran vocación y una inmensa paciencia. Para Isabel van estas galletas, sencillas y hechas con mucho cariño.

Son piruletas-galleta de vainilla y canela, decoradas con fondant, pero lo mejor es el galletón que ha pintado mi hija. Mirad, mirad....

 No me digaís, es toda una artista, que voy a decir yo, que soy la madre de la criatura,   jijiji.

Por cierto, las piruletas están clavadas en un corcho blanco que he pegado al fondo del recipiente, he añadido unos detalles para decorar, como obleas de papel, cartulinas troqueladas, un lazo y algo de papel de seda. Para envolver papel de celofán y queda de lujo.


Me repito mucho, ya lo sé, pero Gracias Isabel, de todo corazón.


Un besito muy dulzón y feliz semana a todos.