La idea era hacer galletas con aceite de oliva y zanahoria, buscar un equilibrio entre ingredientes secos y líquidos y una combinación de sabores resultona. A la zanahoria las especias le van de maravilla, así como el azúcar moreno. Todo este razonamiento para llegar a estas galletas de aspecto rustico, que mantienen la forma a las mil maravillas y que requieren mayor tiempo de horneado.
A la hora de trabajar la masa, es en apariencia más blandita y gomosa, no se endurece en el frigo ya que no lleva mantequilla, asi ganamos tiempo ya que no es necesario tenerla tanto tiempo en la nevera, solo lo justo para que el proceso de cortarlas sea más rápido y limpio. Menudo rollo de friqui repostera os estoy metiendo, mejor os cuento cuales son los ingredientes.
- Rallamos las zanahorias finamente y reservamos.
- Batimos el aceite con el azúcar, el jengibre fresco y la zanahoria rallada.
- Mezclamos las harinas con la sal y las especias.
- Poco a poco añadimos la harina hasta obtener una masa homogenea.
- Finalmente amasamos manualmente y refrigeramos la masa previamente estirada con el rollido durante una hora.
- Cortamos las galletas con la forma deseada y horneamos a 180º durante 15' hasta que se doren.
Notas
- Se pueden variar las especias y poner jengibre molido.
- El sabor de la zanahoria no se nota queda integrado en el conjunto, destacando el sabor y frescor de las especias.
- Requieren más tiempo en el horno como ya he dicho por la humedad de la masa y quedan súper crujientes.
- En vez de leche de avena se puede utilizar cualquier leche o bebida vegetal. Estas galletas son aptas para intolerantes a la lactosa al no llevar ni leche ni mantequilla y para los alérgicos al huevo puesto que tampoco lleva.
Espero que os hayan gustado, ya estoy pensando en la siguiente receta y eso que no he terminado de contaros esta, no tengo remedio, jiji,
Besitos dulces a todos y feliz fin de semana.
tienen que estar riquísimas y muy saludables, me llevo la receta para probarlas
ResponderEliminar